Mamografía

La mamografía, una radiografía de alta definición de la mama utilizando dosis mínimas de rayos X, se erige como una herramienta esencial para la detección temprana del cáncer de mama y otras afecciones mamarias. Esta exploración puede ser digital o tridimensional (3D), abriendo nuevas dimensiones en la precisión diagnóstica, especialmente con la inclusión de la tomosíntesis.

TECNOLOGÍÁ: La mamografía digital, caracterizada por su reemplazo de la película de rayos X por una imagen electrónica, ofrece radiografías superiores con dosis de radiación reducidas. La tomosíntesis es la versión tridimensional de esta técnica, con un proceso muy similar al del TAC enfocado 100% en la mana, proporciona representaciones más realistas de la mama, permitiendo una visión detallada de lesiones, su extensión y ubicación.

PROCESO: Este procedimiento implica el uso de rayos X para obtener imágenes de la mama, destacando diferentes partes según su densidad. Con dosis de radiación mínimas, las mamografías son cruciales para la detección temprana del cáncer de mama, el estudio de lesiones emergentes y el diagnóstico de enfermedades mamarias.

PREPARACIÓN: Realizada de pie, la mamografía convencional implica la compresión de la mama para obtener imágenes claras. No requiere preparación especial, aunque se sugiere evitar objetos metálicos y productos en axilas o pechos. La comprensión puede causar molestias mínimas y se recomienda informar cualquier malestar al profesional sanitario.

CONSIDERACIONES: Situaciones como embarazo, lactancia, cirugías anteriores, golpes en el pecho o prótesis mamarias requieren atención especializada. La prueba es guiada por profesionales sanitarios, y los resultados son interpretados por radiólogos especializados en diagnóstico mamario.

SENSACIONES: En general, la mamografía no causa molestias notables, aunque la comprensión puede generar sensaciones breves. Si es necesario, el profesional sanitario puede requerir pruebas adicionales, como ecografías, para una evaluación más detallada.

La mamografía no solo es una herramienta de diagnóstico, sino un compromiso con la salud mamaria. Con tecnologías avanzadas y cuidado profesional, este viaje detallado, ahora potenciado por la tomosíntesis, proporciona información crucial para la prevención y el diagnóstico precoz de enfermedades mamarias.